¿Imaginas ser muy alérgico a tu piel? Suena imposible de creer, pero este es el caso de una mujer estadounidense, diagnosticada con uno de los tipos más raros de alergia. Sí, ella es alérgica a su propia piel.
Cuando Ashton Brown, nativa de Kentucky, estaba en el tercer trimestre de su embarazo, notó que algo andaba mal. Sus síntomas eran extraños, su piel se irritaba con facilidad, además de tener ampollas y otras reacciones inusuales, similares a los que ocurren durante los brotes alérgicos.
Sin embargo, Brown intentó tomar con calma la situación, puesto que ella nunca había experimentado algo parecido. No obstante, las lesiones en su piel no paraban de aparecer, y finalmente decidió acudir a la sala de emergencias.
Allí le dijeron que no tenía alergia, sino sarna, y que debía seguir un tipo de tratamiento específico para que la enfermedad no afectara al bebé. La sarna es una infección dérmica, causada por ácaros y que, incluso en la actualidad, sigue siendo común.
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Los síntomas de Brown no mejoraron, su piel cada vez estaba peor y la picazón le impedía dormir o descansar. Finalmente, en una visita a su médico de cabecera, el especialista le dijo que no tenía idea de lo que la afectaba y que debía ir, nuevamente, a emergencias.
Después de muchas visitas a la sala de emergencias y a distintos médicos obstetras, Brown finalmente encontró un dermatólogo que diagnosticó su caso. Ella era alérgica a su propia piel, y eso causaba las ampollas, la picazón y el enrojecimiento.
Sin embargo, que una mujer embaraza sea alérgica a su propia piel es algo tan infrecuente, que el dermatólogo también le dijo a Brown que no había visto un caso similar en más de una década. Por su parte, otro especialista obstetra también identificó su situación, y mencionó que en 30 años, Brown era el segundo caso que veía con este tipo de alergia.
Por suerte, la condición de Brown no era totalmente desconocida. De hecho, tiene un nombre clínico, y es conocido como penfigoide gestacional.
El penfigoide es una reacción inmunológica extrema que ocurre en el embarazo, afectando la piel de la gestante. El primer síntoma es picazón en la zona del vientre y el ombligo, luego aparece la irritación y las ampollas, que pueden extenderse por todo el cuerpo, incluyendo brazos, piernas y manos.
El penfigiode aparece durante el segundo o tercer trimestre del embarazo, tal y como le ocurrió a Ashton Brown. La condición empeora luego de dar a luz, y desaparece semanas después del parto.
«Al comienzo de mi tercer trimestre, me iba a dormir y me picaba mucho. Me picaba constantemente las palmas de las manos y los pies y no podía conciliar el sueño debido a eso. Sentí que me hormigueaba la piel», manifestó la mujer.
Poco tiempo después de la aparición de los primeros síntomas, Brown dio a luz a su hijo. El bebé estaba sano, y la alergia de su madre no afectó su desarrollo. Sin embargo, Brown siguió siendo alérgica a su propia piel durante varios años más, y hoy en día todavía sufre brotes ocasionales.
«Dijeron que tan pronto como sacaron al bebé, mi piel cambió de color justo en frente de ellos. Pasó de estar rojo e inflamado a ser púrpura, casi como una cicatriz. Me tomó de dos a tres años curarme de las cicatrices. Todavía tengo brotes leves cuando hay cambios hormonales o estrés», sentenció.
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Brown, quien ahora tiene 33 años y vive en la ciudad de Morganfield, compartió su experiencia con el penfigiode en su canal de TikTok. Sus videos rápidamente se hicieron virales, ya que el caso de la mujer alérgica a su propia piel capturó la atención de muchísimas personas.
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