Es un desorden relativamente común que muchos han experimentado, pero pocos pueden explicar
La despersonalización es una alteración que hace sentir a la persona desconectada de su propio cuerpo. Algunos lo describen como estar ‘observándose desde afuera’.
También hablan de sentirse en un sueño, que puede ser más relacionable. Sin embargo, no pierdes contacto con la realidad, pues concientizas lo que estás sintiendo, pero no dejas de saber que no es real.
En otras palabras, nos puede pasar que nos sentimos en un sueño, pero sabemos que no es así.
Un episodio de despersonalización puede ser tan largo como varios minutos y en unos extrañísimos casos, años. Es un síntoma común en otros desequilibrios y está presente cuando hay abuso de sustancias, desórdenes de personalidad, etc.
Este ‘mal’ que en realidad es bastante común, pertenece al grupo de desordenes disociativos.
Estos se caracterizan por ser disrupciones que involucran episodios de pérdida de memoria, consciencia, identidad o percepción.
La despersonalización en síntomas
Lo primero que se hace notar es una percepción distorsionada del propio cuerpo. Lo vemos raro, ajeno, que no nos pertenece. Hay quienes dicen sentirse un robot.
El miedo a creer que te estás ‘volviendo loco’ no está sustentado en la despersonalización, ya que esto le puede pasar a cualquiera. Solo en muy pocos casos es considerado como un problema que interrumpe la vida.
Puede estar sectorizado, de repente puedes sentir que tus brazos o piernas, por ejemplo, están ‘raros’, alargados o encogidos.
Claro que esto no es exclusivo de la despersonalización, aunque se puede sentir entumecimiento físico/emocional de los sentidos o las respuestas que uno le da al mundo.
Algunos son muy abstractos, como el sentimiento también descrito de sentir que las memorias no tienen significado o que tal vez nuestras memorias no nos pertenecen.
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¿Cuáles son las causas?
No se sabe qué lo causa exactamente. Factores biológicos, psicológicos y de entorno hacen su parte.
Como otros desordenes disociativos, la despersonalización puede tener raíz en un evento traumático (que la persona haya experimentado/presenciado) o estrés de mucha intensidad.