Nicola Coughlan destapó una caja de pandora con su papel protagónico en Bridgerton.
Recordemos que la más reciente temporada de la serie se centra en la relación sentimental entre el personaje de Nicola Coughlan, Penelope Featherington, y el de Luke Newton, Colin Bridgerton.
Para sorpresa de nadie, los aspectos físicos de ambos personajes son un tema de conversación, no solo entre fanáticos, sino entre los líderes de opinión y medios.
Pero demos un poco más de contexto: antes de que se estrenara la más reciente temporada de Bridgerton, Nicola Coughlan dio una entrevista a Stylist donde habló de un momento en particular:
“Hay una escena en la que estoy completamente desnuda frente a la cámara, y esa fue mi idea, mi elección. Simplemente sentí que era el mayor ‘f*ck you’ a toda la conversación en torno a mi cuerpo; fue increíblemente empoderador”, dijo.
Y bueno, a estas alturas todos sabemos de qué escena habla.
A partir de ese momento todo el mundo se sintió con el derecho de seguir opinando de cuerpos ajenos.
Y aunque la mayor parte de los fanáticos de Bridgerton celebraron las declaraciones de la actriz, también hubo quienes la criticaron, no solo por sus palabras sino por la escena en sí, por existir.
Una de esas personas fue la columnista británica Zoe Strimpel, quien escribió en Spectator que Nicola Coughlan «no es sexy», entre otras terribles cosas.
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En defensa de Nicola, Forbes publicó un artículo titulado: ‘Bridgerton’: ¿Aún no estamos preparados para un romance de peso mixto en la pantalla?’. El texto hizo que los fanáticos del cine y las series se hicieran muchas preguntas.
«¿qué pasa con su ‘altura mixta’ o ‘cabello mixto’? JFC simplemente deja que las mujeres existan», dijo una persona en X.
Y entonces llegó lo que era obvio: Las personas evidenciaron que siempre ha habido relaciones heterosexuales de «peso mixto» en el cine y en la televisión, pero en la mayoria de ellas son las mujeres quienes son delgadas.
La escritora Zoe Rose Bryant escribió en X al respecto: «Me parece interesante cómo hay innumerables parejas ficticias en el cine y la televisión donde el hombre pesa más que la mujer pero la gente no empezó a escribir artículos sobre lo que es un “romance de peso mixto” hasta que fue al revés».
Y es verdad. Recordemos a parejas como: Marge y Homero, Vilma y Pedro Picapiedra, Mr y Mrs Incredible, Jonah Hill y Emma Stone en Superbad, los protagonistas Shallow Hal y un sinfín de comedias románticas más.
Y, a ver, nadie está pidiendo que empecemos a hablar de los cuerpos masculinos, sino que pongamos atención en cómo estas conversaciones se abren solo para atacar la diversidad en los cuerpos femeninos.
Los prejuicios asociados a las personas gordas han sido retomados en el cine y la televisión durante décadas. De ahí que tengamos decenas y decenas de ejemplos donde la persona que no es delgada funciona como el comic relief de la historia.
Pero además, el problema se acentúa en los personajes femeninos, porque los estándares de belleza en las mujeres están asociados a la juventud y la delgadez.
“En el momento en el que las mujeres no somos deseables según los cánones establecidos, no se nos pone en pantalla”, dijo Laura Galán en una entrevista con El País.
Y cuando la industria del entretenimiento decide introducir a una mujer gorda en la historia, los personajes, en su mayoría, se reducen a estereotipos que casi siempre conducen a la caricaturización.
“Mucha gente ve estas series e internaliza dichas representaciones sobre la gente gorda”, dijo a El País, Ariane Prohaska, socióloga de la Universidad de Alabama. “Esto nos lleva a tratar a las personas gordas de forma diferente, y nos lleva a hacer que creamos que tenemos que estar mejorando nuestro cuerpo constantemente”.
El personaje de Penélope no solo rompe con estos estereotipos, sino que se apropia del papel protagónico, que durante décadas ha estado destinado a personas con otro aspecto.
Como señaló Helen Cofey en un artículo en The Independent, molesta que el aspecto físico siga siendo un referente para criticar un producto cultural.
Molesta también que siga existiendo gente que piensa que Nicola no es bella porque no cumple con todos los estándares de belleza convencionales de Hollywood y que, por lo tanto, no debería ser considerada lo suficientemente atractiva para ser protagonista. Pero qué me dices del doble estándar.
Hasta ahora nadie parecía estar ocupado en opinar (ya sea para atacar o defender) sobre las «parejas de peso mixto» cuando las mujeres eran la persona delgada de la relación.
Pero esperemos que esto sea un punto de partida para dejar de internalizar prejuicios sobre el aspecto físico de la gente. Las relaciones de pareja en la vida real y en la ficción no son, como dice Helen Cofey, un concurso de belleza hegemónica.
Las personas gordas no son «valientes» por existir o por mostrar su cuerpo, ¿y saben quién tiene las palabras precisas para decirlo? Exacto, Nicola Coughlan, quien respondió así a una persona que la «elogió» por la «valiente decisión» de desnudarse en Bridgerton al ser una mujer con «su tipo de cuerpo».
«Sabes, es difícil porque creo que las mujeres con mi tipo de cuerpo –mujeres con pechos perfectos– no nos vemos lo suficiente en la pantalla. Estoy muy orgullosa como miembro de la comunidad de pechos perfectos. Espero que disfrutes viéndolos”.
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