Estos estudiantes no podrán asistir a los colegios en medio de las sofocantes temperaturas que han superado los 42° centígrados en algunas zonas.
Varios países asiáticos vienen enfrentando una fuerte ola de calor que obligó a las autoridades de Bangladesh a suspender las clases en sus escuelas.
Más de 33 millones de estudiantes no podrán asistir a los colegios en medio de las sofocantes temperaturas que han superado los 42° centígrados en algunas zonas.
Las instituciones estarán cerradas al menos hasta el 27 de abril pero es posible que la medida se extienda por más días. Otros países como India, Tailandia y Filipinas han tomado medidas similares para proteger a la población.
Este es el segundo año consecutivo que las autoridades deciden suspender las clases por las fuertes temperaturas que se registran en gran parte del continente asiático.
Shumon Sengupta, director de Save the Children en Bangladesh, dijo que las condiciones económicas de estos niños también los ponen en una situación de riesgo.
«Los niños de Bangladesh se encuentran entre los más pobres del mundo, y el cierre de escuelas debido al calor debería hacer sonar la alarma para todos nosotros», dijo a la BBC.
Las autoridades meteorológicas emitieron varias alertas porque las temperaturas han llegado a límites “extremadamente peligrosos” para la vida humana.
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Ante esta situación, le pidieron a los hospitales prepararse para atender a un gran número de personas afectadas por el calor. La ministra de salud, Samanta Lal Sen, dijo que los pacientes que sufran golpes de calor deberán ser trasladados a salas con aire acondicionado.
Bangladesh se encuentra en una zona baja del continente y es uno de los países más vulnerables a los impactos del cambio climático, según la Organización Meteorológica Mundial (OMM).
“Muchos países de la región experimentaron en 2023 el año más caluroso registrado, junto con una avalancha de condiciones extremas, desde sequías y olas de calor hasta inundaciones y tormentas», dijo la OMM.
El informe de esta organización advirtió que el cambió climático incrementó la frecuencia y la gravedad de estos fenómenos.
Además, esto termina impactando a las economías pero especialmente a la vida de las personas que vivirán soportando drásticas temperaturas en sus países.