Un hombre está aislado hace un mes por la nieve, pero se niega a evacuar por no dejar a sus 12 perros

Un puestero de una estancia ubicada en el sur de la provincia de Santa Cruz, Argentina, está totalmente asilado debido a la nieve desde hace un mes. Esto en medio de la ola polar que atraviesa la Patagonia.

Aunque el hombre pudo ser rescatado en medio de un operativo que hizo el Ejército, él no quiso y se negó a salir del lugar. ¿La razón? No va a dejar a sus 12 perros abandonados y el rescate no incluye a los caninos.

El protagonista de esta historia es Leandro Leupichum, un hombre que trabaja en un puesto llamado ‘La Verdadera Argentina’, una estancia al sur del río Santa Cruz, cerca de la frontera con Chile.

Su única compañía son sus 12 perros, mientras se encuentra aislado en su puesto de trabajo. Enrique Ibáñez es el dueño del negocio y se ha comunicado con él para cerciorarse de que está bien.

Fue precisamente Enrique quien contó que Leandro no quiso hacer parte del operativo militar para no dejar a sus fieles amigos: «No quiere irse porque no quiere abandonar a sus perros», dijo.

Debido a las condiciones meteorológicas, no hay manera de llegar a ‘La Verdadera Argentina’ por tierra, ya que se encuentra a la vera de la cordillera, junto al límite con el territorio chileno.

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Los soldados le llevan provisiones a Leandro Leupichun

Cuando los soldados del Ejército llegan al lugar, bajan del helicóptero con bolsas y cajas. Allí, de forma despreocupada, los recibe Leandro Leupichun, con rodilleras de chivo que son un aislante natural del frío.

Los soldados le dan medio capón y verduras. Él se niega a irse porque los perros no pueden subir al helicóptero y dejarlos no es una opción.

Cuando el helicóptero llega al lugar, el piloto no puede aterrizar por la gran cantidad de nieve que hay; además, un curso de agua bordea donde se encuentra el puesto.

Ante esto, el helicóptero se mantiene en el aire, a una poca distancia del suelo, para que los soldados logren bajar con los suministros.

Así fue como Leandro Leupichun logró recibir la comida y los soldados aprovecharon para volver a insistirle en que se fuera con ellos, teniendo de nuevo un no como respuesta, ya que sin sus animales no dejará el lugar.

Las temperaturas registradas en el sur del país llegan hasta los 30 °C bajo 0 y se prevé que entrado el invierno haya temperaturas aún más frías.

Muchas liebres se están congeladas y los gatos, en un acto de supervivencia, se alimentan de estos cadáveres. Según el diario La Nación, desde 1907 no existe un registro de tantos días de extremo frío, seguido de nevadas intensas y constantes.

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