El efecto Mozart es una hipótesis que plantea que escuchar su música podría llegar a aumentar la inteligencia y capacidades cognitivas de los niños.
El efecto Mozart es una teoría que afirma que escuchar la música de Wolfgang Amadeus Mozart trae beneficios cognitivos, especialmente en bebés.
Este concepto ha forzado la idea de que la música, especialmente clásica, podría llegar a tener efectos terapéuticos en las personas y aumentar sus capacidades intelectuales.
De esta forma, las composiciones y melodías de Mozart siguen siendo objeto de estudio dos siglos después de su muerte.
Y no es para menos, porque este pianista, director de orquesta y profesor austriaco marcó la historia de la humanidad con su trabajo. Aquí en PlayGround, te contamos qué es el efecto Morzart.
¿Qué es el efecto Mozart?
Este concepto se le atribuye a unos supuestos beneficios que traería para las personas, especialmente para los bebés, ponerlos a escuchar la música de Mozart.
La hipótesis asegura que esto podría llegar aumentar la inteligencia de los niños en su etapa de desarrollo cerebral.
Desde hace varios años, algunos investigadores han tratado de estudiar estos supuestos beneficios. Sin embargo, aún no se ha logrado tener un hallazgo que permita confirmar o desechar por completo esta teoría.
El efecto Mozart tendría su origen en el libro ‘Pourquoi Mozart’ (¿Por qué Mozart?) que publicó el otorrinolaringólogo francés Alfred Tomatis en 1991.
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Este investigador utilizó la música de Mozart en sus sesiones terapéuticas y habría descubierto una supuesta mejora en sus pacientes.
Fue así como llegó a plantear los supuestos beneficios que tendría para el cerebro oír la música del este maestro austriaco.
¿Quién le dio impulso a la teoría del efecto Mozart?
El psicólogo y terapeuta Don Campbell le dio un impulso a esta teoría en 1997, al realizar un estudio sobre estos beneficios y publicar el libro ‘El efecto Mozart: Aprovechar el poder de la música para sanar el cuerpo, fortalecer la mente y liberar el espíritu creativo’.
Desde entonces, varios investigadores se han concentrado en analizar los efectos de la música de Mozart.
¿Qué estudios científicos existen sobre el efecto Mozart?
En 1993, la psicóloga Frances Rausche y el investigador Gordon Shaw hicieron un amplio estudio sobre este efecto.
Para eso, pusieron a 36 estudiantes a escuchar durante 10 minutos la sonata KV448 y descubrieron que mejoraron significativamente su razonamiento en los test de coeficiente intelectual.
Desde entonces, algunas instituciones médicas y musicales vienen usando a Mozart para hacer terapias con sus obras.
El efecto Mozart también motivó a que en algunos estados de EE.UU. se pusiera música clásica de Mozart a los alumnos. Incluso, se les llegó a entregar a las mujeres embarazadas un disco con su música para que la escucharan y se las pusieran a sus bebés.
Este efecto sigue generando controversia porque la comunidad científica no ha logrado comprobar ampliamente estos supuestos beneficios para el cerebro.
Lo cierto es que la música se ha usado desde la antigüedad como un método para reducir el estrés y mejorar el estado de ánimo de las personas.
Consciente o no, este arte tiene un estrecho vínculo con la salud emocional, pero también ha permitido facilitar una mayor conexión social y desarrollar habilidades cognitivas entre las personas.
¿Quién fue Mozart?
Mozart compuso más de 600 obras de música sinfónica, opera, de concierto y de canto, convirtiéndose en uno de los músicos más influyentes del mundo.
Con tan solo seis años empezó a viajar por toda Europa tocando música. Además, Mozart escribió su primera sonata para piano cuando tenía cuatro años.
La fama de este prodigioso niño lo llevó a los más importantes escenarios filarmónicos y aristocráticos europeos en donde deleitaba a todos tocando el piano y el violín.
Sus partituras también lo llevaron a dirigir óperas y conciertos sinfónicos. Su extraordinaria y corta carrera fue todo un éxito, ya que murió con tan solo 35 años en 1791.
Hoy, más de 230 años después, los expertos se siguen sorprendiendo con su gran talento y creen que su música podría llegar a tener beneficios en el cerebro, como en el aprendizaje y desarrollo emocional.
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