La pandemia nos obligó a cambiar muchas conductas para proteger nuestra salud, pero en medio de los nuevos cuidados sanitarios, también surgieron otros hábitos. Por ejemplo, un estudio reciente demostró que las mujeres aumentaron el consumo de alcohol durante la pandemia.
El análisis demostró que muchas mujeres empezaron a consumir alcohol constantemente por los problemas que trajo la pandemia. Sobre todo, los desafíos emocionales y psicológicos para enfrentar en los confinamientos.
A este análisis es respaldado una encuesta solicitada por la Asociación Estadounidense de Psicología en febrero; esta reveló que uno de cada cuatro adultos dijo haber bebido más en este último año. Ese índice fue de más del doble entre las personas que tenían hijos de entre 5 y 7 años.
Más datos sobre el consumo de alcohol durante la pandemia
Investigadores de la Escuela de Salud Pública de Johns Hopkins y de la Universidad de Maryland realizaron un estudio con más de 800 personas, en su mayoría mujeres. Los resultados demostraron que más del 45% de las personas entrevistadas han bebido en este año por causas asociadas al estrés.
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En Brasil, por ejemplo, datos de Compre & Confie señalan que la venta en línea de bebidas alcohólicas aumentó un 93% entre febrero y mayo de 2020. Además, una investigación de Fiocruz, UFMG y Unicamp con 45 mil brasileños indica que el 24.6% de los entrevistados reportó estar ingiriendo más alcohol.
Los investigadores se dicen preocupados porque existen estudios que indican que quienes beben para lidiar con situaciones estresantes, tienen un riesgo mayor de desarrollar adicción. Esto sumado a que el alcohol tiene efectos nocivos como mayor propensión a padecer cáncer, enfermedades hepáticas y cardiovasculares.
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¿Qué otros hábitos trajo la covid?
El aumento en el consumo de alcohol en mujeres no fue el único problema que apareció durante el confinamiento. Distintos especialistas han señalado en numerosas ocasiones que alimentarse precariamente con comida procesada aumenta la vulnerabilidad frente a la covid. Se obtienen menos nutrientes, las defensas bajan y los índices de obesidad se disparan, como ha ocurrido en distintas partes del mundo.
Algunos países están desarrollando medidas para poner freno a esta realidad. Una de las últimas iniciativas más sonadas es la de Reino Unido. El gobierno determinó prohibir totalmente la publicidad digital de comida chatarra. El país es uno de los que enfrenta una creciente crisis de obesidad desde que iniciaron las cuarentenas. Investigaciones también demostraron que uno de cada tres niños que terminan la escuela primaria tiene sobrepeso o es obeso.
Las nuevas reglas afectarían a los alimentos que contienen muchas grasas, alto contenido de sal y muchos azúcares. Si se implementan, serán las restricciones de marketing digital más duras del mundo.
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