Pakistán tiene su primera escuela islámica para personas trans

El contexto para la comunidad LGBT+ en Pakistán es realmente adverso. Los fundamentalismos religiosos condicionan el estilo de vida de los integrantes de este grupo, en especial a las personas trans.

La situación en el país asiático para este sector de la población es más difícil porque se enfrentan al ostracismo, pese a que no hay restricciones oficiales para que asistan a escuelas religiosas o mezquitas. En este contexto, una mujer trans abrió una escuela para personas de su comunidad en Pakistán.

Rani Khan es la persona que inauguró esta academia LGBT en este país. En una entrevista con Reuters la mujer contó por qué decidió abrir una escuela para personas trans en Pakistán.

“La mayoría de las familias no aceptan a las personas trans y las echan de sus hogares. En un momento, yo también fui una de ellas», dijo Rani Khan.

El parlamento de este país reconoció a las personas no binarias en 2018 otorgándoles derechos fundamentales como la capacidad de votar y elegir su género en documentos oficiales. Sin embargo, las personas trans permanecen marginadas en Pakistán. A menudo tienen que recurrir al baile o hacer trabajos de índole sexual para poder subsistir.

¿Cómo funciona la escuela para personas trans en Pakistán?

Esta academia LGBT de Pakistán tiene solo dos habitaciones. En ese pequeño espacio funciona esta escuela para personas trans que, según contó Rani a Reuters, no recibe ayuda del gobierno de Pakistán. Aún así, manifiesta que algunos funcionarios prometieron ayudar a sus estudiantes a encontrar trabajo.

Para evitar la dependencia de esa promesa gubernamental, Rani Khan le está enseñando a sus alumnos y alumnas a coser y bordar. El objetivo es recaudar fondos para la academia vendiendo ropa. Además, se espera que estas personas trans aprendan algún oficio en la escuela para que puedan formar parte del mercado laboral de Pakistán.

Además de recibir formación en distintos campos para tener nuevas oportunidades laborales, las alumnas y alumnos de la institución dedican parte de su día para rezar y estudiar el Corán.

“Estoy enseñando el Corán para agradar a Dios, para hacer mi vida aquí y en el más allá”, dijo Rani Khan.

Esta no es la única iniciativa que hay en el país. También se abrió una academia religiosa LGBT en Pakistán y está ubicada en una ciudad cercana a Bangladesh. Sumado a esto, el año pasado un grupo cristiano transgénero abrió su propia iglesia en la ciudad portuaria de Karachi, en el sur del país.

La discriminación legal contra personas trans

El censo de Pakistán de 2017 registró alrededor de 10 mil personas transgénero, aunque los grupos de derechos trans dicen que el número ahora podría superar los 300 mil en un país de 220 millones.

No muchos estados tienen leyes para garantizar el trabajo y la educación de las personas trans (Pakistán hace parte de esa lista). Además, a nivel mundial, existen muchos mecanismos legales para excluir y criminalizar a esta comunidad.

Actualmente, ningún país de la región prohibe o condena la identidad de género. Sin embargo, igualmente se criminaliza a la comunidad trans según detalla el Informe de Mapeo Legal Trans. La Asociación Internacional de Lesbianas, Gays, Bisexuales, Trans e Intersex —compuesta por más de mil 600 organizaciones— elabora este estudio.

Zhan Chiam, coordinador y coautor de la publicación, advierte que los delitos relacionados con el trabajo sexual o las relaciones interpersonales consensuales entre personas del mismo sexo se usan para perseguir de manera sistemática a estos individuos. También las normas relacionadas a la molestia pública, la indecencia, las buenas costumbres o el merodeo.

Esto genera que muchas personas trans no puedan tener un trabajo donde su cuerpo y su integridad no se vean afectados. Por eso esta academia LGBT de Pakistán enseña oficios, para que las personas puedan acceder a un mejor trabajo.

¿Podrá la población trans abrirse un camino más sólido en Pakistán con el surgimiento de estas instituciones?

También podría interesarte: