A Melanie Shaha la diagnosticaron con un tumor benigno en la glandula pituitaria en 2003, y aunque pensó que su historia con ese tumor había terminado tras una operación, Melanie tuvo que enfrentarlo en dos ocasiones más:
Una en 2006 porque el tumor volvió a crecer y otra en 2017, esta vez para recibir tratamiento con radiación después de que los médicos determinaran que era un tumor cancerígeno.
Al someterse a este tratamiento, Melanie perdió su cabello.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Cáncer de Estados Unidos, el cabello vuelve a crecer de 3 a 6 meses después de la radioterapia, pero recibir una dosis alta de radiación puede hacer que el cabello vuelva a crecer más delgado o que no vuelva a crecer jamás.
«Al no tener cabello, sobresales como un pulgar adolorido y la gente bien intencionada puede decir cosas que te rompen el corazón», dijo la señora en una entrevista con Today.
Pero Melanie no contaba con que su hijo Matt, de 27 años, hiciera algo que la tomó por sorpresa: se dejó crecer el cabello más de dos años para poder hacerle una una peluca.
«Dije: ‘¿Por qué no me dejo crecer el cabello para hacerte una peluca?'», dijo Matt en entrevista con el medio estadounidense.
El cabello de Matt creció 30 centímetros en dos años y medio, lo suficiente para hacer la peluca de su mamá.
Con la ayuda de sus compañeros de trabajo, Matt cortó sus largos mechones de pelo en marzo de 2022 para fabricar la peluca.
«Estábamos súper emocionados y cuando comenzaron a cortar, lloramos», dijo Melanie a Today.
Toda esta historia fue documentada por Mercedes Berg, amiga de Matt, a quien él se acercó para pedirle consejos para el crecimiento del cabello.
Compassionate Creations en Newport Beach, California, se encargó de confeccionar la peluca para Melanie, con un costo de 2 mil dólares, que también cubrió Matt, el hijo de Melanie.
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