Cuando el atleta paralímpico Hunter Woodhall cruzó la línea en la final masculina de 400 m T62 y logró la medalla de oro, lo primero que hizo fue correr para encontrarse con su esposa, Tara Davis-Woodhall.
Ella, un mes antes, hizo lo mismo durante su participación en los Juegos Olímpicos; Tara consiguió su medalla de oro en salto en largo femenino y al ganar se lanzó a sus brazos mientras él estaba en las gradas.
La historia de amor de los deportistas ha conmovido a cientos de personas y los apodaron como ‘la pareja de oro’.
Hunter confesó que ver el triunfo de su esposa lo motivó a convencerse de que él también podía lograrlo.
«Ver a Tara dominar absolutamente su deporte me dio tanta confianza que pude decir que sé que hemos hecho lo mismo y que si ella es capaz de salir y hacer eso, entonces sé que soy capaz de hacer lo mismo», dijo en CNN.
El deportista estadounidense nació con hemimelia peronea, una afección que provoca la ausencia congénita del peroné y que puede afectar los huesos de las extremidades.
Esto llevó a la amputación de sus dos piernas cuando tenía 11 meses por decisión de sus padres.
Tara y Hunter se conocieron en 2017 en una competencia de atletismo en Idaho durante sus últimos años de secundaria.
La norteamericana miró a Hunter mientras hacía su calentamiento para los 400 metros; en ese momento no sabía que el deportista usaba prótesis en sus piernas porque utilizaba pantalones deportivos.
Posteriormente, dialogaron en algunas oportunidades durante el certamen y el vínculo siguió a través de las redes sociales.
La pareja empezó teniendo una relación a distancia debido a que ella vivía en California y él en Idaho. En 2021, el deportista contó cómo manejaron sus sentimientos durante una entrevista con la revista Elle.
“Equilibramos nuestra relación a distancia mediante la comunicación, la confianza y la paciencia. En los últimos cuatro años, aprendimos a comunicarnos y a comportarnos como pareja. Hemos pasado por innumerables situaciones en las que nos ha ido mal a ambos lados, pero hemos aprendido de esas lecciones y realmente queremos que nuestra relación crezca”.
En octubre de 2022 decidieron dar el siguiente paso y se casaron en Texas. Ahora, además de tener un matrimonio feliz, ambos se han consagrado como grandes deportistas internacionalmente.
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