El eclipse solar total del 8 de abril concentró la atención del mundo por la forma como oscureció durante unos minutos a una parte de Norteamérica, pero en lo que queda del 2024 se registrarán otros dos eclipses.
Esta fue la primera vez en casi siete años que este eclipse se presentó en esta zona del planeta y fue completamente especial porque no se volverá a registrar sino hasta el 2044.
Los habitantes de México, EE.UU. y Canadá tuvieron la fortuna de presenciar este eclipse de forma directa en su territorio; mientras que millones de personas lo pudieron ver a través de las transmisiones en vivo.
Un eclipse solar ocurre cuando la Luna se mueve entre el Sol y nuestro planeta proyectando una sombra sobre la Tierra al bloquear total o parcialmente la luz.
De esta forma, este fenómeno astronómico es muy especial y sobre ellos se han venido construyendo varios mitos a lo largo de la historia.
El próximo eclipse se registrará el 17 y 18 de septiembre. Esta vez será un eclipse lunar parcial que será visible en gran parte de Europa, Asia, Norteamérica y Sudámerica.
En este fenómeno nuestro planeta se atravesará en el camino entre el Sol y la Luna provocando una sombra sobre la superficie lunar. Sin embargo, esta vez la Tierra no alcanzará a cubrir por completo la Luna llena.
Ver más: Así se vio el eclipse solar total que oscureció una parte de América del Norte
Además, Sudamérica también será privilegiada este año porque el 2 de octubre podrá contemplar un eclipse anular de sol en Chile y Argentina.
Este fenómeno, conocido como ‘anillo de fuego’ se produce cuando la Luna no alcanza a cubrir totalmente el Sol dejando a la vista un anillo alrededor de la estrella.
Todos los años se producen en la Tierra unos eclipses por cuenta de un proceso de alineación entre nuestro planeta con el Sol y la Luna.
De esta forma, hay dos tipos de eclipses: lunar y solar. El primero se produce cuando la Tierra se interpone entre el Sol y la Luna oscureciendo su superficie.
Este fenómeno se produce solo con Luna llena cuando nuestro satélite natural entra en la zona de sombre del planeta.
«Durante un eclipse lunar, la Tierra impide que la luz del sol llegue hasta la luna. Eso quiere decir que a la noche, la luna llena desaparece por completo, a medida que la sombra de la Tierra la cubre», explica la NASA.
De pendiendo del cono de sombra generado por la Tierra, los eclipses lunares puede ser de varios tipos: totales, parciales y penumbrales.
Los eclipses solares se generan cuando la Luna se interpone entre el Sol y nuestro planeta impidiendo que sus rayos lleguen a su superficie.
En este caso, la Luna proyecta su sombra sobre la Tierra oscureciendo por unos minutos la zona por donde se proyecta.
«Este eclipse total se produce aproximadamente cada año y medio en algún lugar de la Tierra. Un eclipse parcial, cuando la luna no recubre por completo al sol, se produce al menos dos veces por año, en algún lugar de la Tierra», dijo la NASA.
De esta forma, no todos tienen la oportunidad de ver los eclipses solares ya que no son muy frecuentes.
Cuando sucede se tiene que estar en la parte soleada del planeta y por eso muy pocos lugares pueden contemplarlos de forma directa.
Además, la seguridad es prioritaria a la hora de contemplar un eclipse solar porque puede generar afectaciones en los ojos si se observa de forma directa. Los eclipses de sol se dividen en tres tipos: total, anular y parcial.
De acuerdo con la agencia espacial, para que un eclipse solar se registre durante unos minutos en un mismo lugar del planeta tienen que pasar 375 años aproximadamente.
El 2024 aún tendrá dos eclipses que concentrarán la atención de millones de personas en el planeta.
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