Pablo Neruda murió 12 días después del golpe de Estado de Augusto Pinochet.
La Primera Sala de la Corte de Apelaciones de Santiago ordenó reabrir la investigación por la muerte del poeta chileno Pablo Neruda, la cual ocurrió 12 días después de que el golpe de Estado de Augusto Pinochet derrotara al gobierno socialista de Salvador Allende en septiembre de 1973.
«Apareciendo de los antecedentes que no se encuentra agotada la investigación, existiendo diligencias precisas que podrían aportar al esclarecimiento de los hechos (…) se ordena la reapertura del sumario», dijo el juzgado en un fallo unánime publicado.
La jueza que está a cargo de la investigación, Paola Plaza, debe esclarecer si el Premio Nobel falleció por el cáncer de próstata, como se ha conocido, o si realmente fue envenenado por un agente secreto de la dictadura.
«La unanimidad del fallo es un espaldarazo a nuestra apelación. Hemos conseguido quitarle la lápida que querían ponerle a esta investigación. Llevamos 14 años peleando por esclarecer la muerte de Neruda», aseguró a EFE Elizabeth Flores, abogada de la familia.
«Es muy importante esta decisión porque ratifica nuestras denuncias y nuestros antecedentes respecto de que, en el contexto en que se produce la muerte, hubo intervención del aparato de terrorismo de Estado de la dictadura cívico-militar», declaró EFE Juan Andrés Lagos, encargado de Relaciones Políticas del PC.
Foto: AFP
La muerte de Pablo Neruda antes de exiliarse en México
El autor de ‘Veinte poemas de amor y una canción desesperada’, ‘Los versos del capitán’, ‘Canto General’, entre otros, murió el 23 de septiembre de 1973 en la Clínica Santa María, en Santiago, un día antes de que se fuera a exiliar en México.
Dadas las circunstancias, surgió la tesis de que el autor realmente fue envenenado y fue planteada públicamente por primera vez por el chófer y secretario personal del poeta, Manuel Araya, quien fallecido en junio del año pasado y fue una de las últimas personas que le vio con vida.
Gracias a su testimonio, el Partido Comunista presentó la denuncio y dio origen en el 2011 a la investigación que hoy deberá reabrirse.
«La verdad tarda en llegar, pero lo está haciendo de a poco. Es un gran logro en la justicia que llevamos pidiendo desde hace años para mi tío Pablo», apuntó por su parte a EFE Rodolfo Reyes, querellante y sobrino del poeta.
La investigación ha contado con la participación de tres paneles de expertos internacionales y dio una vuelta en 2017, cuando el segundo grupo de especialistas desestimó la versión oficial que apuntaba a que Neruda había fallecido por cáncer de próstata. Además, se encontró «clostridium botulinum» en una muela del poeta.
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La bacteria encontrada
El «clostridium botulinum» es un bacilo que se encuentra por lo general en la tierra y que puede causar problemas al sistema nervioso, llegando a ocasionar la muerte.
Un tercer grupo de expertos de las Universidades de McMaster (Canadá) y Copenhague (Dinamarca) mostró hace un año que la bacteria «estaba en su cuerpo en el momento de la muerte»; para la familia esta es una prueba irrefutable de que Pablo Neruda fue «envenenado» durante su permanencia en la clínica.
«Neruda desde el año 2017 está gritando que en su cuerpo tiene ‘clostridium botulinum’ y que le llegó por intervención de terceros», mencionó la abogada Flores.
Sin embargo, esto sigue siendo una incognita y no se sabe de qué forma (natural o intencionada) se habría introducido en el cuerpo la toxina botulínica, pues esta también suele encontrarse en alimentos enlatados mal preservados.
En este nuevo fallo, la Primera Sala de la Corte de Apelaciones de Santiago ordenó la realización de varios procesos como un peritaje caligráfico del certificado de defunción y la toma de nuevas declaraciones.
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