Las autoridades de Italia capturaron a una banda de seis ladrones que eran liderados por tres hombres de entre 68 y 77 años.
Estos delincuentes fueron detenidos después de que se comprobara que habían cometido robos a mano armada en las oficinas de correos de Roma.
Lo que llamó la atención de la policía es que esta banda estaba liderada por Sandro Baruzzo (68 años), Raniero Pula (77) e Italo De Witt, que es apodado como el «alemán» y que tiene 70 años.
Aunque estos adultos mayores podrían parecer inofensivos, en realidad hacían parte de una peligrosa estructura criminal.
De acuerdo con los reportes, esta banda estaba muy organizada. Por ejemplo, tenía a un hombre de 68 años especializado en la fabricación de llaves para abrir las cerraduras.
Además, estaba conformada por dos albañiles de 51 y 56 años que eran los encargados de abrir los agujeros por donde la pandilla ingresaba a las oficinas de correos.
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La Fiscalía explicó que la base de operaciones de estos criminales era un bar desde donde planeaban sus rojos.
«No se comunican por teléfono, salvo raras excepciones, porque, gracias a la experiencia criminal adquirida a lo largo de los años, no quieren correr el riesgo de ser descubiertos», dijeron los investigadores a Roma Today.
Sandro, Raniero e Italo tenían un amplio historial como ladrones que se remontaba desde hace casi 50 años.
Sin embargo, uno de sus últimos planes de robo no salió como esperaban y fueron capturados en flagrancia por la policía en noviembre.
Fue así como estos tres delincuentes fueron detenidos demostrando que el tiempo, en este caso, no hizo cambiar a las personas.
La policía empezó a seguirles el rastro luego de que cometieran un robo a una oficina de correos en mayo de 2023.
Para ese entonces, tres hombres con máscaras, sobreros y gafas de sol ingresaron a esta sede y amedrentaron con pistolas al personal para llevarse 195.000 euros (211.000 dólares).
Los investigadores descubrieron que estos hombres tenían planeado cometer nuevos robos; pero sus planes se empezaron a dañar por varios factores.
El diario italiano La Repubblica reseñó que uno de los robos fue cancelado porque el experto en fabricar llaves se enfermó y tuvo que ser operado de la próstata.
Fue así como la banda intentó dar un nuevo golpe el 6 noviembre sin pensar que la policía los estaba siguiendo.
Los albañiles se encargaron de abrir un hueco en la pared para facilitar que los tres líderes entraran a la oficina de correos.
Cuando intentaban salir con un botín de 152.000 euros (165.000 dólares) fueron capturados por la policía.
«La banda fue acusada de al menos nueve ataques dentro de oficinas de correos, bancos y ataques a vehículos blindados. Podrían haber sido diez, pero fueron detenidos antes de un robo en la oficina de correos cerca del edificio de la FAO», indicó La Reppública.
Debido a su prontuario criminal, los seis delincuentes fueron condenados a cuatro años de prisión pero su historia pareciera ser sacada de una una película.
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