Mientras la Selección Colombia llega a la final de la Copa América, el país se queda sin liga femenina

La Selección Colombia femenina cumplió con la tarea: clasificó a la final de la Copa América, celebrada en suelo colombiano; logró un pase al Mundial femenino de Australia-Nueva Zelanda 2023 y a los Juegos Olímpicos de París 2024, una proeza de una chicas que a duras penas cuentan con el apoyo de su Federación.

El talento de las seleccionadas colombianas es evidente. Las chicas juegan como si se conocieran de toda la vida y la afición las respalda. Sí, estadio que ha pisado la Selección Colombia en su país, estadio que se ha llenado por los hinchas locales.

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Sin embargo, la victoria de la Selección Colombia femenina frente a la Argentina, la cual les dio el pase a la final de la Copa América, tuvo un sabor agridulce en el país. En Twitter los hinchas manifestaron su tristeza al ver cómo las jugadoras colombianas dan todo en la cancha, mientras la Dimayor, el ente rector del fútbol colombiano, le quita el apoyo a la liga local femenina.

Los canales de televisión privados tampoco las apoyan. Cuando la Selección masculina juega, cambian su programación habitual para televisar el partido, en cambio, los encuentros de la Selección femenina de plano no son televisados. Los colombianos han tenido que recurrir a la televisión por cable para ver los partidos de ‘las chicas superpoderosas’.

De los sueldos, ni hablemos. La brecha salarial entre la Selección masculina y la femenina es abismal, pese a que la primera no juega una final de un torneo internacional desde el 2001. Sin ir más lejos, los hombres se quedaron por fuera del próximo Mundial. Evidentemente la brecha salarial no es por merecimiento.

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Celebro los triunfos de la Selección Colombia femenina mientras le quito el poco apoyo que tenía

Como si fuera poco, el pasado 7 de julio la Dimayor canceló la liga local femenina alegando dificultades económicas. Sí, la competencia que ha sido la cuna de más de la mitad de las mujeres que hoy hacen parte de la Selección, incluida una de sus más grandes figuras: Daniela Montoya (Junior de Barranquilla).

Un día después del anuncio, en el estadio Pascual Guerrero, antes de su primer partido en la Copa América y frente a miles de hinchas, las integrantes de la Selección Colombia alzaron sus puños en señal de protesta mientras sonaba el himno nacional. Todas se oponen a la cancelación de la liga.

Hoy, políticos y figuras del deporte se están manifestando enérgicamente por los triunfos de la Selección, pero gran parte de ellos guardaron silencio por la cancelación de la liga. La Dimayor, por ejemplo, celebró en redes el pase a la final de Colombia pese a que le quitó el apoyo a la competencia femenina local.

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«Gran triunfo de la Selección Colombia femenina, y estruendosa bofetada a la dirigencia del fútbol que no está a la altura de las jugadoras», dijo el periodista Félix de Bedout.

La incoherencia de los dirigentes del fútbol colombiano es indignante. El presidente de la FIFA, Gianni Infantino estuvo presente durante un partido de Colombia y allí se preparó todo para dar la impresión de que en el país se apoya el talento femenino, pero no es así.

¿Y ahora?

Mientras tanto, las mujeres siguen ganando y cosechando frutos. Las selecciones sub-17 y sub-20 femeninas también se clasificaron a los mundiales de sus respectivas categorías. Talento hay y de sobra, entonces, ¿qué es lo que pasa?

Ahora, más de la mitad de las mujeres que hacen parte de la Selección Colombia femenina deberán buscar empleos alternativos una vez termine la Copa América. Esperemos que su participación en el torneo les abra puertas en ligas femeninas de otros países para que sigan haciendo lo que les apasiona: jugar al fútbol.

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