Esta mujer decidió donarle un riñón a un hombre desconocido que se cruzó mientras caminaba por un cerro en EE.UU.
Una mujer le donó un riñón a un hombre desconocido que se cruzó mientras caminaba por un cerro en EE.UU.
La historia de Krissy Miller se volvió viral luego de que se conociera que su bondadoso acto le salvó la vida a Shiller Joseph.
Este hombre de 46 años llevaba varios años esperando un donante de riñón debido a que desde lo 20 sufría lupus y esta enfermedad atacó sus riñones.
Durante todo este tiempo su estado de salud empezó a empeorar provocándole un aumento de peso, hipertensión y sus riñones terminaron fallando por completo en 2021.
Esto hizo que los médicos le ordenaran diálisis en 2021 y a registrarse en una lista de donantes en Florida.
En realidad las expectativas eran bajas y Shiller necesitaba un regalo del cielo para recibir este órgano.
Una caminata que lo cambió todo
Shiller Joseph empezó a caminar para tratar de llevar una vida saludable y decidió mudarse de Florida a Utah en 2020 esperando avanzar más rápido en la lista de espera de donantes.
Los dos se conocieron en una montaña en Provo (Utah) en septiembre de 2023 y Krissy le preguntó por qué le gustaba este lugar, a lo que Shriller le respondió con su dura historia.
Esta mujer empezó a llorar al conocer su situación y en medio de eso pensó que podría ayudarlo.
A remarkable gift and forever bond occurred after two strangers met while hiking in Provo, Utah. Shiller Joseph, who was in dire need of a kidney, received an unexpected surprise when hiker Krissy Miller offered to donate hers. @DavidMuir has the story. https://t.co/2gTEMi4OA4 pic.twitter.com/AUhC1ym3nK
— World News Tonight (@ABCWorldNews) September 26, 2024
Ver más:Un hombre esperó nueve años por un trasplante de riñón y casi lo pierde al estar en una remota montaña
De hecho, ella había intentado donar su riñón en 2022 a un hombre que compartió su historia en Facebook.
Fue así como ella lo contactó, pero las cosas no salieron como esperaba porque tenía niveles altos de azúcar y no fue compatible para hacer la donación.
«Pensé: ‘Si ese fuera mi marido, querría que alguien me ayudara’. Y luego pensé: ‘Si todo el mundo piensa que alguien más puede hacerlo, nadie lo hará», dijo a la revista People.
Los médicos le aconsejaron bajar de peso para poder mejorar su salud y poder convertirse en una donante.
De esta forma, Krissy empezó a hacer caminatas diarias y los resultados se empezaron a notar, ya que logró bajar 16 kilogramos.
Sin embargo, su idea de ser donante nunca se le salió de la cabeza y al encontrarse con este hombre durante su caminata pensó que era el momento ideal.
“Recuerdo que pensé: ‘Si estoy dispuesta a donar a alguien, ¿por qué no a esta persona que está frente a mí’?…Sentí que era una respuesta a mis oraciones”, dijo.
Un exitoso trasplante de riñón
Los dos se mantuvieron en contacto y formaron una gran amistad, pero un día ella descubrió que compartía el mismo grupo sanguíneo de o+ con Joseph.
Fue así como Krissy le preguntó sobre qué pensaba de que le donara un riñón y él le respondió: «Haga lo que Dios le diga».
Esta mujer de 49 años se realizó unos exámenes y un día decidió compartir la noticia con este hombre sobre su compatibilidad.
Joseph se quedó conmovido y se puso a llorar al mostrarse agradecido con la generosidad que iba a tener esta mujer.
«¿Cómo puede ser que esta mujer sea compatible conmigo? Ni siquiera me conoce, pero me enseñó lo que significa tener fe y confianza», compartió el hombre.
La fecha esperada llegó el 2 de abril de 2024 cuando ambos se sometieron a unas cirugías exitosas en Intermountain Medical Center, en Murray.
Este trasplante le terminó salvando la vida a Joseph y su historia se volvió un ejemplo para crear consciencia sobre el flagelo que sufren millones de personas esperando una donación de órganos.
Los médicos explicaron que un donante vivo puede darle una segunda oportunidad de vida a más de 90.000 personas en EE.UU. que esperan un trasplante de riñón.
Las expectativas de vida son bastante preocupantes. En 2023, solo 6.290 personas, de 27.000 que estaban en espera, recibieron un trasplante de riñón de una persona viva.
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