En las últimas dos décadas los hombres demostraron tener una mayor deserción religiosa que las mujeres en EE.UU., pero esto parece haberse revertido en los miembros de la Gen Z.
Un estudio del Centro de Encuestas sobre la Vida Estadounidense del American Enterprise Institute confirmó que los hombres de esta generación son más religiosos que las mujeres de su edad.
Por ejemplo, ellos suelen asistir con mayor frecuencia a los servicios religiosos y se identifican más con su religión que las mujeres.
Ellas son las que históricamente han sido las más religiosas; pero su papel ha venido cambiando porque casi el 40% de las mujeres Gen Z dice que no pertenecen a ninguna religión frente al 34 % de los hombres.
Estas cifras cambian en otras generaciones. Por ejemplo, la deserción religiosa en los Baby Boomers es mayor en los hombres en un 57 % frente a un 43 % de mujeres.
En la Generación X y millenials la cifra de abandonos ronda entre los 55 % y 53% para los hombres y un 45 % y 47% para las mujeres.
La investigación establece que factores como el feminismo, la diversidad de género y los valores culturales han hecho que las mujeres crean cada vez menos en la religión.
«Aunque las tasas de desafiliación religiosa han aumentado, las iglesias conservadoras han podido retener a sus miembros, pero enfrentan una batalla más difícil para mantener a esta generación actual de mujeres jóvenes en las filas de la iglesia», dice el estudio.
Temas como los abusos y la anulación de la protección al derecho al aborto en EE.UU. también han influido para que las mujeres valoren cada vez más sus derechos.
Además, ellas creen que en las iglesias no las tratan en igualdad con los hombres. Por ejemplo, no les permiten ocupan puestos de liderazgo o relevantes en la sociedad por su visión patriarcal y conservadora.
“Las mujeres más jóvenes están más preocupadas por el trato desigual que reciben las mujeres en la sociedad estadounidense y desconfían más de las instituciones que defienden los acuerdos sociales tradicionales”, concluyó la encuesta.
Este escenario ha hecho que los hombres tengan las menores tasas de deserción religiosa. Una explicación es que en parte tienen menores niveles de educación y valoran más el concepto de familia tradicional.
Lo cierto es que número de miembros de las iglesias lleva varios años disminuyendo en Estados Unidos y otros países del mundo.
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