Para Marina de Tavira la maternidad va más allá de lo que todos vemos el Día de las madres
¿Qué significa la maternidad?
A muchas nos dijeron que era un sinónimo de «realización personal».
En ese sentido, a veces sentimos la presión de ser mamás porque es un papel que nos impusieron a nivel social, cultural y familiar.
Pero los tiempos cambiaron y las perspectivas sobre la maternidad también.
Muchas mujeres decidimos no ser madres, otras han decidido serlo con todo su amor a pesar de los pronósticos funestos que plantea el cambio climático, algunas quieren adoptar, otras se arrepienten de ser madres, muchas más buscan la fertilización in vitro y otras interrumpir su embarazo.
¿Nuestras decisiones sobre la maternidad nos vuelven merecedoras de algún juicio? No. Y de este tema nos habla Latido, película de la directora mexicana Katina Medina Mora, que desafía las convenciones y lugares comunes de lo que representa ser madre en México y América Latina.
¿De qué trata Latido?
Leonor, interpretada por la actriz nominada al Oscar Marina de Tavira, es una mujer que lleva años sometiéndose a duros procesos hormonales para lograr concebir un hijo.
Emilia, personificada por Camila Calónico, es una adolescente de 16 años, cuyo sueño de ser bailarina profesional se ve interrumpido por un embarazo no deseado.
Las protagonistas son dos mujeres que aparentemente no tienen nada que ver: de edades distintas, con sueños opuestos, y realidades socioeconómicas distantes, pero ambas representan dos miradas de una misma experiencia, ser mamá.
«La maternidad no es eso que romantizamos y celebramos el 10 de mayo», expresó Marina de Tavira en entrevista con Playground sobre la película.
Latido cuenta la historia de estas dos mujeres, cuyos caminos se cruzan gracias a la danza. Leonor trabaja en una organización que apoya a jovenes talentos y Emilia es una bailarina que aspira a obtener una beca para cumplir su sueño.
Cuando se conocen, ambas acuerdan que Emilia le dará en adopción a Leonor a su hijo para poder seguir con su vida, pero en el camino, la relación entre ellas da un giro.
La película explora temas que atraviesan a las mujeres en la sociedades contemporáneas: el aborto, el embarazo adolescente, la infertilidad y la dureza de los tratamientos hormonales de las mujeres que buscan ser madres y no pueden.
La burocracia y la corrupción de los procesos de adopción en México, la forma en que las labores de cuidado casi siempre recaen en las mujeres, e incluso ese fenómeno en el que las abuelas se convierten en madres de sus nietos.
«Para mí fue investigar en el proceso que viven las mujeres, que quieren ser madres y no han podido, conocer los tratamientos tan fuertes a los que se someten, lo que esto les hace a su cuerpo, a su psique, a la pareja misma, si es que existe. Y después confrontado con el embarazo adolescente que es altísimo en Latinoamérica y altísimo en México», cuenta Marina de Tavira.
¿Qué es la maternidad para Marina de Tavira?
«Es complejo, un trabajo diario que es cansado, un proceso que requiere la complicidad de las paternidades, que por más que lo decimos y lo decimos y se va avanzando, no hemos llegado para nada a un lugar en donde haya una equidad en las responsabilidades, en los trabajos compartidos», expresó la también coprotagonista de Roma.
Y ahondó sobre las desigualdades entre hombres y mujeres que le siguen pesando a la sociedad en pleno 2024.
«Ni laboralmente, ni familiarmente, ni en términos de pareja. Estamos a años luz de que exista una una igualdad en ese sentido. Y creo que parte también de cómo vemos el 10 de mayo tiene que ver con eso, con romantizar.
«Las madres tan felices, tan amorosas, tan sacrificadas, tan realizadas, porque una mujer se realiza siendo mamá, ¿no? O sea, tú ya te realizaste porque eres mamá, y poco hablamos de la depresión postparto, y poco hablamos de los embarazos no deseados. Son cosas que necesitamos amplificar», finalizó De Tavira.
Latido se estrena este 10 de mayo en la plataforma Amazon Prime Video.
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