“Te vamos a violar”. Indignación en el fútbol español por las amenazas de aficionados a jugadoras del Osasuna B

Indignación en el fútbol español por los insultos de aficionados a jugadoras del Osasuna B. Foto: EFE

El fútbol español ha vuelto a vivir un capítulo vergonzoso. Sucedió en un partido de la Primera Nacional Femenina, la tercera categoría del sistema femenino de Ligas de fútbol en España. El Osasuna B jugaba contra el S.D. Nueva Montaña de Santander. Al final del partido, el Osasuna ha denunciado públicamente los graves insultos y las amenazas machistas que han tenido que soportar algunas de sus jugadoras a manos de aficionados del club cántabro.

Lo que dice el acta arbritral

Durante la segunda mitad del juego, cinco jóvenes con el chándal del Nueva Montaña hostigaron repetidamente a varias jugadoras de Osasuna desde la banda.

Una de las peor paradas fue Karolina Sarasua, internacional en las categorías inferiores de España y campeona nacional de Muay Thai. Tal y como recoge el acta arbitral, Sarasua tuvo que soportar improperios, amenazas y comentarios hirientes que van desde el “¡Se os nota el tanga!” y el “¡Súbete la camiseta y enséñame las tetas!” al “Vamos a bajar al vestuario y te vamos a violar”. Todo sazonado con exabruptos machistas de garrafón como “Tu madre me la chupa” y “Tienes cara de chuparla bien”.

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Los insultos han causado malestar e indignación entre jugadoras de todas las categorías, incluida la primera liga femenina. “¡Basta ya! Ni tenemos ni debemos tolerar más este tipo de actuaciones denigrantes hacia las mujeres. Tienes todo mi apoyo, compañera. Ayer fue a ti, mañana será a otra”, escribía en sus redes Mai Garde, jugadora del primer equipo de Osasuna.

Tampoco pudo contener su enojo Alèxia Putellas, capitana del Barça.

Las críticas y la reprobación general llega también hasta el cuadro técnico del S.D. Nueva Montaña. Según el acta arbitral, el técnico Juan Hernández se personó en la zona de vestuarios al acabar el partido para protestar por haber sido expulsado del terreno de juego. La colegiada consigna que el entrenador “se dirigió a mí en los siguientes términos, a voz en grito: ‘Vas a subir a Selaya (localidad cántabra) y te van a abrir la cabeza, inepta’”.

¿Es posible un fútbol libre de odio?

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