Millones de personas en el mundo viven con autismo y han tenido que afrontar su condición a pesar de que no son comprendidos y suelen ser estigmatizados por sus comportamientos
El 2 abril se celebra el Día Mundial del Autismo para concientizar sobre esta condición neurológica que se manifiesta por primera vez en la infancia y que se caracteriza por afectar la forma como una persona se comunica y relaciona.
Las personas que nacen con el también conocido Trastorno del espectro autista (TEA) suelen enfrentar algunas dificultades para aprender; así como por mostrar un interés especial por ciertos temas y tener una predisposición a realizar actividades rutinarias.
El autismo no es una enfermedad
Esta condición es calificada erróneamente como una enfermedad pero en realidad se trata de una afección del neurodesarrollo que afecta el funcionamiento del cerebro.
«Las capacidades y las necesidades de las personas con autismo varían y pueden evolucionar con el tiempo. Aunque algunas personas con autismo pueden vivir de manera independiente, hay otras con discapacidades graves que necesitan constante atención y apoyo durante toda su vida», explica la Organización Mundial de la Salud (OMS).
De acuerdo con los expertos, se estima que en el mundo uno de cada 100 niños tiene autismo pero las cifras podrían ser mucho mayores.
Es por esto que podríamos estar conviviendo con una persona autista sin saberlo porque solemos normalizar muchos de sus comportamientos.
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De esta forma, miles de personas en el mundo viven con autismo y han tenido que afrontar dificultades para la educación y acceder a oportunidades de empleo.
Las actitudes que tienen en los ámbitos sociales hace que estas personas necesiten de un apoyo en su interacción con otras personas para que se sientan más seguras.
Todo esto lleva a las personas con autismo a que sean objeto de discriminación y estigmatización; lo cual puede agravar su condición de salud porque suelen apartarse socialmente.
Además, no realizan actividades físicas, adquieren malos hábitos alimenticios y tienen un mayor riesgo de sufrir violencia, lesiones y abusos.
La ONU decidió adoptar el 2 de abril como el Día Mundial del Autismo para crear conciencia obre esta condición.
¿Qué significa el Día Mundial del Autismo?
Como una medida para fomentar la inclusión y garantizar el respeto de los derechos de todas las personas sin importar su condición, la Asamblea General de la ONU de 2007 declaró el 2 de abril como el Día Mundial del Autismo.
«Ya no se trata solo de concienciar a la opinión pública, sino de promover la aceptación y el aprecio de las personas autistas y de su contribución a la sociedad», dijo la ONU.
Es así como esta celebración busca promover una defensa de los derechos de las personas diagnosticadas con autismo y sensibilizar al mundo sobre esta condición.
De esta manera, varias organizaciones realizan campañas y conferencias para informar sobre el autismo en varios países del mundo.
¿Qué produce el autismo?
Los científicos no han podido determinar exactamente el origen del autismo. Se cree que hay varios factores que llevan al desarrollo de este trastorno.
De acuerdo con el portal especializado Medline Plus, uno de ellos serían genéticos; ya que se ha logrado establecer que el TEA se da en algunas familias.
Además, el consumo de ciertos medicamentos durante el embarazo también puede influir para que un niño desarrolle esta condición.
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Algunos científicos consideran que el daño en la amígdala cerebral podría estar relacionado; así como el contagio de un virus.
Esta condición no tiene una cura como tal pero si se cuenta con un tratamiento que mejora la condición con el uso de terapias del lenguaje y habla, terapia ocupacional, fisioterapia y medicamentos en caso de ser necesario.
Por ejemplo, uno de los programas más usados es el Tratamiento y Educación de Niños Autistas y con Impedimentos Relacionados con la Comunicación (TEACCH) dirigido para los menores diagnosticados.
Otro muy utilizado es el Análisis del Comportamiento Aplicado (ABA) que utiliza la enseñanza personalizada para reforzar varias destrezas y supervisar el comportamiento del niño.
¿Cuáles son los síntomas del autismo?
Los síntomas del TEA suelen aparecer antes de los tres años de edad. Algunos niños empiezan a mostrar alguna sintomatología en el primer año de vida.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CDC) reconocen que es difícil diagnosticar el autismo debido a que no existe una prueba física o médica como tal.
«Para dar un diagnóstico, los médicos evalúan la conducta del niño y su desarrollo. Los TEA, a veces, pueden detectarse a los 18 meses de edad o antes. Hacia los dos años, el diagnóstico de un profesional con experiencia se puede considerar confiable», dice el CDC.
Lo cierto es que muchos niños reciben este diagnóstico a una edad más avanzada; especialmente cuando son adolescentes y adultos y por eso no reciben ayuda oportuna.
De esta forma, los principales síntomas del autismo están relacionados con problemas para comunicarse e interactuar con otras personas.
Las personas con autismo también muestran conductas o intereses por algunos temas de forma restrictiva o repetitiva.
Además, los autistas podrían desarrollar ciertas maneras de aprender, moverse y prestar atención.
Ejemplos de síntomas del autismo:
- Evitan mirar a los ojos y no mantienen contacto visual
- Los niños no responden a su nombre o no escuchan lo que les dicen-
- No muestran expresiones de felicidad, tristeza entre otras.
- No participan de juegos interactivos
- No juegan con otros niños
- No realizan actividades como cantar o bailar para los padres.
- Organizar juguetes en fila y les molesta que se los desordenen.
- Repiten palabras o frases
- Juegan de la misma forma con los juguetes y se enfocan en una parte específica.
- Presentan retrasos del lenguaje, movimiento o de aprendizaje.
- Tienen conductas hiperativas o distraídas
- Tienen inusuales hábitos de alimentación y del sueño
- Presentan cambios en los estados de ánimo
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