Imagina que eres un cantante famoso y que tus fans no te arrojen flores o un Doctor Simi durante tus shows, sino las cenizas de una persona muerta. Pues eso fue lo que le ocurrió a Pink en su último concierto.
Pink se encontraba en el American Express Presents BST Hyde Park en Londres, cuando se dio cuenta que le habían arrojado algo al escenario.
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Se trataba de una bolsa con un polvo gris en su interior. Bastó con que Pink tomara el objeto para darse cuenta que se trataba de las cenizas de un cadáver.
Sorprendida, la cantante le preguntó dos veces al sujeto que lanzó las cenizas que si era lo que ella creía: «¿esta es tu mamá?», preguntó la cantante.
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Ante la afirmación de su fan, Pink solo pudo decir: «no sé cómo sentirme al respecto». Finalmente, con cara de miedo, volvió a dejar las cenizas que le arrojaron en el suelo y continuó con su show.
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Muchas personas en redes manifestaron que lo ocurrido en el show de Pink con las cenizas de un cadáver es aterrador; sin embargo, otros creen que detrás de lo ocurrido posiblemente hay una historia conmovedora.
Pink no ha sido la única artista a la que sus fans le han tirado cosas que rompen con todos los límites; por ejemplo, a Ozzy Osbourne un fanático le lanzó un murciélago durante su show en el Veterans Memorial Auditorium en 1982.
Ozzy pensó en su momento que se trataba de un murciélago de plástico y muy a su estilo, le mordió la cabeza al animal. Osbourne se dio cuenta que se trataba de un murciélago real cuando sintió la sangre en su boca.
«De inmediato todo se sintió mal. Para empezar, mi boca estaba llena de ese líquido caliente, pegajoso, con el peor sabor de boca que te puedas imaginar. Podía sentir que manchaba mis dientes y corría por mi barbilla. Entonces la cabeza en mi boca se crispó. ‘Oh, jódanme’, pensé. No me digan que me acabo de comer un maldito murciélago», dijo en su autobiografía.
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