El padre de Britney Spears pide ahora 2 millones de dólares por su renuncia como ‘tutor legal’ de la artista

Hace algunas semanas, el mundo celebró el anuncio de que Jamie Spears renunciaba a seguir ejerciendo la tutela legal de su hija. Fans y medios corrieron entonces a celebrar “la libertad de Britney Spears” del hombre que había controlado y decidido sobre el dinero, el patrimonio, la carrera, las amistades y hasta su vida reproductiva de la artista desde 2008. Pero aquel fue un anuncio de intenciones, que no venía ligado a ningún horizonte temporal concreto. Y ahora sabemos que Jamie no parece dispuesto a salir de escena gratis.

 

Renuncia condicionada

En agosto, Jamie Spear se expresó a favor de su sustitución. “Nuestro cliente no cree que una batalla pública con su hija por su servicio continuo como su tutor sea lo mejor para ella”, decían sus abogados en el expediente presentado ante el juez. El padre manifestó su intención de “trabajar con el Tribunal y el nuevo abogado de su hija para preparar una transición ordenada a un nuevo tutor”. Pero Jamie no ofreció un calendario para su partida. Su renuncia efectiva se produciría “después de que se resuelvan varios problemas persistentes, incluida la próxima contabilidad”.

 

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La “próxima contabilidad” implica pagos sustanciosos para él. El equipo legal de Britney Spears ha informado de que el padre demanda cobrar hasta 2 millones de dólares. En documentos judiciales recién presentados, el abogado de Britney, Mathew Rosengart, compara la medida con la “extorsión”.

“El descarado intento del señor Spears de canjear la suspensión y la remoción a cambio de aproximadamente 2 millones de dólares en pagos, a sumar a los millones ya cosechados hasta ahora del patrimonio de la señorita Spears por el señor Spears y sus asociados, es una pretensión que no tiene ninguna posibilidad de ser aceptada”, escribe Rosengart en el documento presentado.

 

15 años viviendo a costa de su hija

En la sonada audiencia judicial del pasado junio, Britney acusó a Jamie y a otros miembros de su familia de vivir de ella durante años. “Teniendo en cuenta que mi familia ha vivido de mi tutela durante 13 años, no me sorprendería que alguno de ellos tuviera algo que decir [en contra de poner fin a mi tutela]”, dijo. Britney llegó a sugerir el haber sido objeto de explotación laboral. “Trabajé siete días a la semana, sin días libres. Lo único similar a esto que existe en California se llama tráfico sexual”.

 

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Según Forbes, Jamie habría sacado al menos 5 millones de dólares de la tutela de Britney. La jueza que en su día decidió sobre la supuesta incapacidad de la artista para manejar su propia vida estableció una remuneración de 16.000 dólares al mes para su padre como tutor. En 12 años, esa cantidad equivale a 2,4 millones de dólares. En documentos legales presentados en agosto de 2021, Rosengart muestra que Jamie solicitó 541.000 dólares adicionales el año pasado para “asuntos de medios”. Según un informe de The New York Times, Jamie también se asignó un participación en los ingresos por las giras de Britney. La gira Femme Fatale 2011 le habría dejado al menos medio millón de dólares. La residencia de Britney en Las Vegas le reportó mucho más: unos 2,1 millones de dólares.

“Simplemente no me gusta sentir que trabajo para las personas a las que pago”, dijo la artista en junio. Viendo estas cifras, no cuesta entender cómo se siente.

 

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