El artista puertorriqueño invitó a varios artistas a su show.
El pasado 12 de septiembre el Auditorio Nacional de la Ciudad de México se llenó de alegría al darle la bienvenida a Álvaro Díaz con su tour “Sayonara”.
El evento fue muy visual y sensorial, pues llevó una historia desde el inicio hasta el final, provocando que la audiencia enloqueciera con cada canción y con la trama que conectaba cada uno de los temas que cantaría.
Sorprendió al público con todos los invitados que tuvo en el concierto
Álvaro creó momentos inolvidables para todos los espectadores, debido a que tuvo invitados que fueron muy inesperados pero muy queridos por los fans.
Dándoles la bienvenida a PaoPao, Bratty, Jesse Báez, NSQK, Yoshi, Young Cister, Papi Sousa, Zizzy y Rainao. Sin embargo, hubo una invitada que conmovió a todos en el público y esa fue la mamá de Álvaro Díaz; el público la recibió con una ovación y con muchísimo amor.
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Álvaro se encargó de poner a cantar a todos en el Auditorio
El artista se aseguró de interpretar todos los éxitos más pedidos por la gente como lo es “Reina Pepiada”, “Babysita”, “En PR no hace frío”, “Problemon”, “Sin poderes”, “Close Friends” y muchísimas canciones que pusieron a bailar y a disfrutar a todos en el auditorio.
En cada momento, Álvaro conectó con la audiencia y los hizo partícipe de la historia de «Sayonara», pero tuvo un momento en el que estremeció al público: bajó del escenario mientras cantaba “Golden Gun” para estar más cerca de sus fans, dando un momento más íntimo y especial.
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Una noche memorable, con un espectáculo visual y sensorial sin igual
Álvaro Díaz tuvo una despedida motivadora al ritmo de “Yoko”, dejando a la audiencia con una noche que recordarán. Pero eso no fue todo, ya que Álvarito fue más que amoroso con la Ciudad de México y no dudó en repetir lo agradecido que está por el apoyo de los mexicanos de seguir su música y disfrutar cada sencillo nuevo que tiene.
La velada culminó con un cálido «nos vemos pronto», dejando claro que esta no será la última vez que el puertorriqueño conquistaría los corazones de la capital mexicana.
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