Ni el milagro más poderoso de la Tierra conseguiría devolvernos a nuestra antigua normalidad antes del próximo 14 de febrero (aunque ojalá). Así que hemos querido hacer un repaso de cómo se presenta el Día de los Enamorados en tiempos de COVID.
Dentro de 30 años, cuando los lectores de PlayGround tengamos edad de contar anécdotas del pasado y personificar la ¿tierna? expresión de ‘abuelo cebolleta’, recordaremos el 2020 y el 2021 como el año del confinamiento. El año en que intentamos hacer pan casero y nos quedó un churro pinchado en un palo. El año que quisimos tener el mismo culo que Patry Jordan y que morimos en el intento. El año en que “inserte aquí un tópico del confinamiento”.
Todo esto es hipotético, obviamente. Quizás la redactora de este artículo peca de ingenuidad e inocencia y en 30 años estemos matando zombies o protagonizando un spin off de Mad Max, pero en la vida real (a lo cutre y sin Tom Hardy, vamos). No obstante, pensemos en positivo que para eso LELO nos ha enviado uno de sus estimuladores de clítoris para celebrar San Valentín.
Oh, San Valentín. Qué festividad tan cursi y odiosa, por favor. Qué oda al amor romántico. Puaj. Pero qué curioso es analizarlo en plena era de pandemia.
Porque si hay algo que nos ha dejado el confinamiento, además de secuelas psicológicas de todo tipo, es el repunte de separaciones y divorcios debido a la cuarentena. Piénsalo bien: ¿cuántos de tus amigos se han separado?
Ni el teletrabajo, ni el estrés, ni la ansiedad por estar encerrados han ayudado. Y el largo periodo al que nos hemos visto alejados de nuestro entorno más allá de la pareja no ha facilitado nada las cosas.
Por no hablar ya de la gente que estaba soltera previamente al estado de alarma. ¿Cómo se liga en tiempos de COVID, eh? ¡¿EH?! Hay podcasts, artículos y reportajes intensísimos sobre el tema. ¡Y no es para menos!
No obstante, quizás este San Valentín sí se presenta como el más amable para los solterxs. ¿Pero por qué?
Este 14 de febrero, ni calles llenas de enamorados, ni calles llenas en general. “A daros amor a vuestra pu** casa” debería ser el mensaje oficial de este Día de los Enamorados.
Escasa decoración cursilera a la vista. Seamos sinceros. Ha sido un año tan nefasto para las relaciones como para los negocios. No pinta a que nadie vaya ahora a tirar la casa por la ventana para llenar los locales de globos con forma de corazón, confeti y papel maché rosa y rojo.
Esto nos lleva a la conclusión de que si va a haber un protagonista este próximo 14 de febrero, ese va a ser el ‘self-love’ que nos vamos a dar. Y en casita.
Porque a ver, el año ha empezado pésimo, pero eso de darse amor propio no se deja a un lado así como así. Ya me entendéis. 😏
El caso es que LELO nos ha enviado a la redacción de PlayGround uno de sus masajeadores de clítoris estrella para que lo probemos, el LELO Sila, y queremos hacer un repaso de por qué es mucho mejor que en San Valentín apuestes por un producto así en vez de comprar la típica e industrial tarta de manzana con forma de corazón que venden debajo de tu casa.
Advertencia: estos tips del producto van dirigidos tanto a mujeres solteras que no quieren perder el darse una alegría, como a mujeres que están en pareja y también quieren disfrutar solas o hacer partícipes a su cónyuge de su autoplacer femenino.
1.
Es más fácil de usar que un triciclo. No hay fallos. No hay caídas (en el caso del triciclo, claro). Depende de donde uses este, no aseguramos la fuerza y equilibrio de tus piernas. jeje
Su diseño está pensado y estudiado para que, una vez colocado entre tus piernas, abarque toda la zona necesaria para que llegues al clímax sin tener que ir moviéndolo en busca de tu zona más sensible del clítoris.
2.
Tiene marchas (al final sí que va a parecer una promo de un triciclo, ¡pero no!) y es sumergible. Su forma redondita está pensada para que, lo uses de la forma que lo uses (e incluso bajo el agua), te resulte cómodo para cambiar de marchas y darle más o menos intensidad.
3.
LELO ha creado este producto bajo el concepto de slowsex. Es decir, todo lo contrario a lo de “te lo pones y en un minuto ya has llegado al orgasmo”. El LELO Sila está pensado para ser sugerente, para tentarte, para engañarte y hacerte pensar en ese “casi, está casi aquí”, para hacerte esperar unos minutos más y para después hacerte estallar.
4.
Con esta intención de intensificar los orgasmos, la marca quiere dejar clara su postura respecto al autoplacer femenino y a ese “tómate tu tiempo para conocerte a ti misma”. Una buena forma de dedicarnos el tiempo que nos merecemos, de conocer nuestro cuerpo, y de saberlo tanto en los momentos cuando disfrutamos a solas o cuando queremos transmitírselo a con quienes pasamos San Valentín.
Entonces… ¿es o no es este Día de los Enamorados el más amable con las personas que están solteras? 😎