Después de dos años de espera, Oh! The Ocean ya está aquí, el nuevo álbum de The Wombats que refleja una reinvención audaz y fresca de su sonido característico. En este trabajo, la banda originaria de Liverpool se arriesga a explorar territorios que nunca antes habían tocado, mientras mantienen su esencia intacta. Durante nuestra conversación con Tord Øverland Knudsen (bajista), reveló cómo el álbum fue creado, las decisiones creativas que marcaron el camino y la evolución de su sonido.
El punto de partida para Oh! The Ocean fue claro: dejar atrás lo conocido. “No queríamos hacer lo mismo de siempre”, comenta Tord Knudsen. “Queríamos probar algo nuevo, algo que nos sacara de nuestra zona de confort”. En este sentido, el álbum abre con Oh! The Ocean, una canción con capas sonoras que dan la sensación de estar flotando en el mar. “Siempre nos hemos sentido cómodos haciendo lo que hacemos, pero también hemos querido desafiar nuestras propias fronteras. Este álbum es el resultado de eso”.
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La decisión de incorporar más elementos electrónicos y sintéticos fue uno de los giros más sorprendentes de este álbum. «En canciones como Gravity’s Gone o Cameras Flash, quisimos mezclar lo analógico y lo digital, lo orgánico y lo sintético», menciona Tord. “Aunque siempre hemos tenido una base de guitarras, ahora queríamos sumergirnos en sonidos más espaciales y menos convencionales. No queríamos alejarnos demasiado de lo que somos, pero sí abrir nuevas puertas”.
“Para nosotros, la música siempre ha sido un espacio donde podemos ser libres, sin limitarnos a lo que otros esperan de nosotros. Oh! The Ocean refleja eso”, explica Tord. Las letras también juegan un papel crucial en este cambio, ya que aunque siguen siendo inteligentes y un tanto juguetonas, abordan temas más introspectivos, como la desconexión y la búsqueda de sentido en tiempos inciertos.
Al hablar de Oh! The Ocean, es imposible no notar la influencia de lo cinematográfico en la producción del álbum. Las canciones no solo son un viaje sonoro, sino también una experiencia visual. “Queríamos que la música tuviera un carácter más visual”, dice Tord. “Nos imaginábamos todo el álbum como una película, como si cada canción fuera una escena que te sumerge en un mundo diferente. Y, al mismo tiempo, queríamos mantener esa sensación de ser una banda en vivo”.
Este enfoque, tanto sonoro como narrativo, se refleja en temas como Waves Without Wires, que tiene una sensación expansiva, pero también personal. La letra de la canción refleja una introspección profunda, pero al mismo tiempo transmite una energía vibrante y positiva. “Es sobre la sensación de perderse en algo más grande que uno mismo, pero también sobre encontrar tu propio camino a través de la incertidumbre”, comparte Tord.
A pesar de los cambios en el sonido, la química entre los miembros de la banda sigue siendo la misma. “Aunque probamos nuevos elementos y sonidos, siempre mantenemos la misma energía entre nosotros. Es esa conexión la que sigue haciendo que todo suene como The Wombats”, agrega Tord. “Al final del día, las ideas de todos se combinan y nos llevan a un lugar donde nos sentimos orgullosos. Este disco tiene lo mejor de lo que somos, pero también tiene lo mejor de lo que hemos querido ser”.
‘Oh! The Ocean’ ya está disponible en todas las plataformas digitales ¿Ya tienes tu canción favorita del álbum?