Estos animales han demostrado tener una gran capacidad para sobrevivir en los lugares más áridos y calurosos del mundo
Los camellos son unos mamíferos conocidos por sus jorobas y capacidad para adaptarse a los ambientes desérticos más extremos del mundo.
Estos animales pertenecen a la familia de los camélidos junto con los dromedarios, las llamas y las vicuñas, los cuales han generado mucha curiosidad a lo largo de la historia por su evolución.
Habitan especialmente las zonas desérticas de África, una parte de Oriente Medio y Asia, en donde son una fuente fundamental de recursos como leche, carne, lana y transporte para las comunidades de estas regiones.
De esta forma, los camellos son fundamentales para los ecosistemas extremos porque le brinda sustento al medio ambiente y a las personas.
En medio de la amenaza del cambio climático, estos animales han demostrado tener una gran capacidad para sobrevivir en los lugares más áridos y calurosos del mundo.
Por ejemplo, pueden aguantar varios días sin agua y alimentándose solo de arbustos ásperos. A pesar de esto, siguen produciendo leche, por lo que muchos los prefieren frente al ganado vacuno que es más vulnerable a estos climas.
Curiosamente, los camellos tienen su origen en América del Norte hace unos 40 millones de años, pero terminaron migrando a otros continentes en donde han tenido su evolución.
¿Cuántas jorobas tienen los camellos?
Los camellos tienen dos jorobas, las cuales les ha permitido adaptarse a entornos tan difíciles como los desiertos durante toda su evolución.
Desde tiempos inmemorables se pensó que almacenaban agua en sus gibas y esto les permitía sobrevivir.
Sin embargo, estos animales en realidad tienen grasa en estas protuberancias que les brinda energía para recorrer largas distancias.
Esta grasa también evitaría que estos animales tengan sed con frecuencia y los mantendría hidratados.
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Los camellos también tienen un sorprendente metabolismo que hace que no tengan que consumir grandes cantidades de comida para obtener energía.
Por ejemplo, estos animales pueden llegar a beber hasta 40 galones (151 litros) de agua una sola vez.
Otra de las adaptaciones que tiene esta especie es que rara vez sudan y esto les permite conservar el agua en su cuerpo durante largos periodos de tiempo.
En un mundo donde las sequías se están volviendo cada vez más intensas y frecuentes, estas capacidades han hecho que estos animales sean los más adaptados a los efectos del cambio climático.
Esta especie de camélido miden 1.85 metros y puede llegar a vivir unos 45 años.
En los lugares que han sido domesticados son usados principalmente para el transporte en medio del desierto. De hecho, estos animales pueden llegar a correr a casi 70 kilómetros por hora y desarrollaron unas largas pestañas que les brinda una protección especial en sus ojos debido al fuerte viento de las zonas áridas.
¿Qué diferencias tienen los camellos de los dromedarios?
La principal diferencia entre los camellos y los dromedarios son sus jorobas.
Cuando veas a un animal con dos jorobas sabrás que se trata de un camello; mientras que si tiene solo una giba será un dromedario.
Los expertos han explicado que la evolución de estos animales modificó sus cuerpos para adaptarlos a su hábitat natural.
Por ejemplo, la única joroba del dromedario está más adaptada a entornos cálidos, pero los camellos suelen tener una mayor ventaja en climas fríos.
Lo cierto es que en ambos casos las gibas guardan grasa que utilizan para regular su temperatura corporal y almacenar energía para sobrevivir en lugares extremos.
Estas jorobas también pueden adoptar diferentes tamaños, ya que cuando los animales están bien alimentados suelen ponerse duras y erguidas.
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