Este joven colombiano ha conmovido por su historia luego de que a sus 36 años pidiera una muerte asistida para poner fin a la difícil condición de salud
El joven Javier Acosta se despidió de su perrita unas horas antes de practicarse la eutanasia y se conoció que la dará en adopción a través de una fundación.
Este colombiano ha conmovido por su historia luego de que a sus 36 años pidiera una muerte asistida para poner fin a la difícil condición de salud que enfrenta.
Javier contrajo una grave infección en una piscina, la cual se ha expandido por sus huesos y varias partes de su cuerpo.
Además, recientemente fue diagnosticado con cáncer en la sangre y desde hace unos años está en una silla de ruedas por cuenta de un accidente de tránsito.
Debido a que su pronóstico no es muy esperanzador, este joven decidió realizarse la eutanasia para no tener que seguir enfrentando estas enfermedades que deteriorarán cada vez más su calidad de vida.
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Sin embargo, hace unos años Javier había adoptado a Katy, una perrita que se convirtió en su compañera, y con esta situación decidió regresarla a una fundación para que le busquen un nuevo hogar.
Con una emotiva carta difundida en las redes sociales, esta perrita fue puesta en adopción y en el texto le agradece a Javier por haberla rescatado hace unos años y por compartir momentos de felicidad juntos.
“Te voy a extrañar mucho, pero prometo jamás olvidarte, solo te pido que mandes unos ángeles para que pronto vuelva a estar en una familia rodeada de amor”, escribió la fundación Adopta un Buen Amigo Chan al recibir a la perrita.
Los mensajes de apoyo a Javier no se han hecho esperar y su historia ha conmovido a las redes sociales en donde ha sido tendencia.
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