El origen del año bisiesto está relacionado con el movimiento de traslación que hace la Tierra para darle una vuelta completa al Sol.
El año 2024 inició con nuevos propósitos y metas para millones de personas pero también muchos se han preguntado por qué es un año bisiesto.
El hecho de que este año tenga un día adicional, 366 en vez de 365 días, sorprende a más de una persona que aún no entiende las razones que llevan a esto.
De esta forma, cada cuatro años el mes de febrero no tendrá 28 días como es habitual en el calendario y se le sumará un nuevo día para completar un desfase que acumula la Tierra.
¿Cuál es el origen del año bisiesto?
El origen del año bisiesto está relacionado con el movimiento de traslación que hace la Tierra para darle una vuelta completa al Sol.
Todo se debe a que cada año se acumula un desfase entre los 365 días que tarda nuestro planeta en este proceso acumulando un año.
Pero en realidad, la Tierra hace este movimiento en cerca de 365.25 días, por lo que cada año dejamos de contar 6 horas.
Es por eso que cada cuatro años se añade un día adicional (2024) al calendario para compensar este día faltante que suma la Tierra en darle la vuelta al Sol.
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De esta forma, los años bisiestos son importantes para mantener el calendario sincronizado con el año astronómico y con los periodos de las estaciones.
Sin ellos, el desfase entre el calendario y las estaciones sería cada vez mayor y el control sobre el tiempo se podría volver todo un caos.
Esta tradición de los años bisiestos se remonta a la Antigua Roma. En el año 46 a.C., el emperador romano Julio César introdujo el calendario juliano, que tenía 365 días, con un día adicional cada cuatro años.
Este calendario se utilizó en Europa durante siglos, hasta que fue sustituido por el calendario gregoriano en el siglo XVI que fue establecido por el papa Gregorio XIII al establecer de forma precisa que la tierra tarda 365 días, 5 horas, 48 minutos y 56 segundos en darle la vuelta a nuestra estrella.
Desde 1582 empezó a regir el calendario gregoriano. En general se mantiene la regla de los cuatro años pero puso una nueva condición: se eliminan tres años bisiestos cada cuatro siglos.
Además, se estableció que un año será bisiesto siempre y cuando sea divisible por cuatro.
A lo largo de la historia, los años bisiestos también han marcado al mundo. Por ejemplo, importante celebridades han muerto en estos años o han ocurrido varias catástrofes.
Sin embargo, un dato curioso es que los Juegos Olímpicos, que se celebran cada cuatro años, siempre se han realizado en un año bisiesto.
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