El barco se encuentra a una profundidad de más de 3 mil metros en el mar de Weddell, un área restringida en el océano Antártico
En 1915 el barco Endurance, del legendario explorador angloirlandés Ernest Shackleton, se hundió en las inhóspitas aguas de la Antártida. Pues bien, en las últimas horas, un grupo de científicos argentinos encontraron este barco, el cual es una pieza histórica invaluable.
Según el geólogo Juan Manuel Lirio, integrante del Instituto Antártico Argentino, el Endurance se encuentra en un muy buen estado de conservación. Su proceso de deterioro ha sido lento por la ausencia de «taredos» en las aguas de la Antártida, una especie de gusano marino que se puede alimentar de la madera de los barcos.
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«Lo encontraron bastante completo, es un monumento histórico. Los británicos estuvieron bastante interesados en encontrarlo, porque de alguna manera es un barco emblemático», dijo Lirio en una entrevista.
El hallazgo del Endurance
El hallazgo del Endurance no fue una casualidad, es el resultado del trabajo de un equipo que emprendió su búsqueda a inicios de febrero. Partieron desde Sudáfrica en busca de esta pieza histórica.
El barco se encuentra a una profundidad de más de 3 mil metros en el mar de Weddell, un área restringida en el océano Antártico por las condiciones meteorológicas del lugar.
«El mar de Weddell tiene muchos témpanos de hielo y es una zona muy difícil de navegar. El problema principal de hallar el Endurance fueron las condiciones marítimas de Weddell, por el frío y la cantidad de hielo», dijo el geólogo.
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Ciertamente, el Endurance se encuentra en una zona que está protegida por el Tratado Ártico, un acuerdo entre países que, entre muchas otras cosas, estipula que todo objeto que se encuentre en estas aguas debe ser tratado como monumento histórico; es decir, no se puede tocar ni manipular bajo ninguna circunstancia.
«Por el Tratado Antártico no podés tocarlo ni sacar ningún artefacto, queda tal cual como está. Es un museo sumergido del que no se puede sacar nada, no podés llevarlo a ninguna parte y exponerlo», sentenció Lirio.
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